UN POETA DE SOPETRÁN

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Foto: Gustavo Bustamante A.   Escultura de Darío Sevillano.
Poema: Miguel Ángel Herrera Herrera – Alta Miranda, Sopetrán, Colombia.

LETANÍA

Desde estos campos floridos
donde sumergido se divisa
este hermoso paisaje de Sopetrán;
Alzando sus torres al cielo;
Mi amada basílica Nuestra Señora de la Asunción
Virgen morena, madre de Dios
y madre de todos.

Ella es mi protección; de mis pensamientos;
Y la única inspiración espiritual a mis virtudes.
De ser siempre grato
a esta revelación de los sentimientos de amor y poesía.
Es ella la Virgen Morena
Con muchas estrellas y ángeles
Con la luna bajo sus pies.

Y yo al fin orando silencioso
logré comprender que
nos está protegiendo todos los días.

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Caminando por una de las Veredas, vino a saludarme Miguel Ángel Herrera, y me pidió que leyera su poema que había escrito, dedicado a la Virgen Morena, le dije que lo haría, y al llegar a casa, después del viaje, lo leí y hoy quiero publicarlo en este blog dedicado a Sopetrán. Desde aquí, ya en España, pero siempre en el recuerdo, Miguel, como ves, no te he olvidado. Gracias por tu gesto, por tu poema y que sea Ella, la Virgen Morena, la que te bendiga siempre donde estés con tu verso. Mis saludos y agradecimiento.  Julie Sopetrán

LA VIRGEN MORENA

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Don Gustavo Bustamante, natural de Sopetrán, Colombia, mandó imprimir este pequeño programa para el acto que se celebró en la Biblioteca Pública Piloto. Tengo que alabar el buen gusto y la buena idea de insertar la imagen de la Virgen Morena de Sopetrán, que se venera en Sopetrán de Colombia. Don Gustavo insertó dos poemas míos impresos en el anverso. Detalle que agradezco desde aquí y que ahora quiero compartir con los lectores de este blog. Muchas gracias a Don Gustavo y al municipio  de Sopetrán

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SOPETRÁN EN SUS 400 AÑOS

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Mis amigos, Don Gustavo Bustamante Morato y Don Darío Sevillano Álvarez, crearon un PDF libro extraordinario, dando a conocer lo que es y lo que significa Sopetrán en América. Cada vez que abro este PDF disfruto plenamente de la esencia sopetranera de Colombia. Les adjunto un Índice de tan valioso trabajo:

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Sin duda es esta una tarea de Amor, de entrega a la tierra, a los lugares que nos definen. Desde estas páginas, felicito con mucho cariño a Gustavo y Darío por tan hermoso trabajo. Ellos, mejor que nadie, conocen Sopetrán, y con ellos aprendo a valorar la inmensa belleza de la tierra colombiana. Amigo lector, si quieres conocer Sopetrán, no dejes de adentrarte en este PDF. Te lo recomiendo. Y en honor a estos dos quijotes de Sopetrán, aquí les dejo una décima por su estupendo trabajo:

Darío y Gustavo son
dos hijos de Sopetrán;
ellos lo que tienen dan
porque nacieron con don:
Faenar es su expresión
la bondad, su pleitesía
ellos crean alegría
sin dejar de trabajar,
que su tarea es, amar
a su pueblo, noche y día.

Julie Sopetrán

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Mi viaje a Sopetrán

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Calle típica – Foto: JS

Después de unos días pasados en Colombia, vuelvo al día a día de este blog. Contaros la historia de mi viaje a Colombia la iré contando en este blog tal y como ya les he prometido a mis amigos colombianos que empiezo a construir el blog SOPETRÁN EN COLOMBIA, muy parecido al que tengo de MAGIAS DE MÉXICO.  Pero unas palabras son obligadas para decirles que me he venido enamorada de un país que me ha mostrado muy bellos lugares, como Medellín, Santa Fe de Antioquia, y ante todo Sopetrán… Lugares y gentes que me han llenado el alma de muy gratos recuerdos y deliciosas experiencias. Los niños, los estudiantes de la Normal Santa Teresita, las gentes de Sopetrán, las fiestas patronales, los jóvenes, los estudiantes, los ancianos… Ha sido en las escuelas, los miembros de el mismísimo Ayuntamiento, todos, me han premiado con su calor humano, su educación, su respeto, su cordialidad… Hemos compartido poesía, historia, hemos reído y llorado a la vez con esa emoción a flor de piel hermanada en palabra y sentimiento. Sólo quiero resumir con brevedad que ha sido un viaje precioso, uno de los más hermosos de mi vida.  La palabra gracias, es muy poca cosa para tanto recibido. Han sido sorpresas de condecoraciones a nivel nacional, como la Medalla que otorga el Senado de la República, Aquí vive la Democracia, en el grado de Caballero; entrega de la llave de la ciudad de Sopetrán; nombrarme hija adoptiva; recibir la medalla del “Orden al Mérito Social y Político Horacio Muñoz Suescun” categoría oro. Y todavía más y más generosidad de este pueblo colombiano que agradezco desde estas líneas. Don Gustavo Bustamante, creó con mi nombre una página en facebook, a mi que no me gustan las redes sociales… pero ahí está creo que cada momento vivido en Sopetrán. Don Darío Sevillano, historiador del lugar, al que después de casi cuarenta años he conocido en persona. Y el misionero idente, Domingo García, que un día nos encontramos en el Hospital de Guadalajara, en España, para hacer posible esta visita de hoy, sin ni siquiera proponerlo, pero sí, formamos parte del ayer en el hoy histórico de Sopetrán. Mi voz se ha escuchado en la radio, en la biblioteca, en las escuelas y, hasta he salido en la televisión que me diría cualquier niño sopetranero… y ellos, los niños, son los que me hicieron sentir importante. Las alboradas, que no conocía y que comenzaban a las cuatro de la madrugada. Las misas a la Morena de Sopetrán, las charlas en la Academia de la Historia, los profesores, las procesiones a la Virgen, la pólvora, el aguardiente, la música, el bambuco… las motos, la grandiosa vegetación, la deliciosa comida, el café o tinto, el mondongo, las arepas, los caballos, las fincas, los puentes colgantes, las frutas, el sabor a guayaba, el Cauca…
Quiero que sepas, amigo lector, que Colombia es un paraíso y que allí me han tratado como a una reina. A los quince años, buscando en el diccionario Espasa, la palabra Sopetrán, supe que era un municipio de Colombia, soñé visitarlo algún día, y os aseguro que los sueños se cumplen cuando menos lo esperas en el tiempo. Ese sueño que tenía que ver conmigo, se ha cumplido hace unos días.
Gracias Gustavo, Darío, Domingo, Viky, pueblo de Sopetrán, Ayuntamiento, a la Doctora Nidia Marcela Osorio Salgado, a Colombia, a las personas con las que ya me había escrito antes, a las que he conocido ahora, a todos, gracias por tanto que me han dado, no sé si lo merezco, pero haré lo posible para que así sea. Les quiero y si dudas dónde quieres ir a pasar las vacaciones, yo te recomiendo Sopetrán, de Colombia.